Por lo que he podido deducir leyendo ciertos privados crípticos que me ha filtrado mi conspiratopo en forolocos, algún iluminado se plantea acudir al juicio llevando una microcámara oculta en la chepa para tomar constancia de todas las manipulaciones que se desarrollen ante sus ojos.
Los que estamos en el mundillo podremos identificarlo porque en la sala vestirá un jersey con el dibujo de un archivador y cada mañana antes de que todo empiece, estará repartiendo a la puerta del juzgado un conciso cuestionario de 100 preguntas con el que tratará de influenciar a las masas para que apoyen su causa.
Si alguno tiene el cuajo de invertir cuatro horas asomado a ese abismo lógico hasta responderle algo con sentido, se quedará tan agusto tras su chute de atención que se pondrá a bailar la danza del escorpión hasta que ipsilateralmente no pueda más.
Todo esto podría ocurrir de otra manera, seguramente esté interpretando el contenido de esos privados de una manera torticera...