
El caso de Madeleine McCann, la niña británica desaparecida en 2007 en Praia da Luz, Portugal, ha dado un nuevo giro con recientes declaraciones que señalan a Christian Brückner como el principal sospechoso. Un excompañero de celda ha aportado un testimonio clave en el juicio que se sigue contra Brückner por otros delitos, arrojando nuevos detalles sobre la desaparición de la menor.
La confesión en prisión
Laurentiu Codin, un exreo rumano de 50 años que compartió celda con Brückner en 2020, declaró que el alemán le confesó haber secuestrado a una niña en Portugal. Según Codin, Brückner detalló que mientras robaba en una zona de hoteles de lujo, encontró una ventana abierta en un apartamento, por donde ingresó buscando dinero. Sin embargo, en lugar de encontrar efectivo, Brückner aseguró haber encontrado a una niña, a la que decidió llevarse.Codin relató que Brückner habló abiertamente de la desaparición, mencionando que dos horas después del secuestro, la zona estaba rodeada por la policía y perros rastreadores, lo que lo obligó a huir rápidamente. También dijo que Brückner estaba acompañado por otra persona, con quien tuvo una discusión en ese momento. Este detalle refuerza las teorías de que Brückner no actuó solo.
Además de su confesión sobre el secuestro, Brückner le preguntó a Codin si era posible extraer ADN de huesos enterrados. Esta pregunta ha levantado sospechas sobre si Brückner intentó deshacerse de evidencias relacionadas con el crimen, lo que podría haber complicado la búsqueda de Madeleine en los años siguientes.
Codin también afirmó que Brückner le pidió que, una vez en libertad, quemara su guarida para destruir cualquier prueba incriminatoria. Este tipo de declaraciones coinciden con la sospecha de que Brückner habría tratado de eliminar rastros clave que lo vinculaban con la desaparición de la niña británica.
La vida del sospechoso en Praia da Luz
Christian Brückner es conocido por su historial delictivo, que incluye robos y delitos sexuales. En 2007, año en que desapareció Madeleine, Brückner vivía cerca de Praia da Luz, la misma localidad donde se encontraba la familia McCann de vacaciones. Durante años, las autoridades han investigado su posible implicación en el caso, ya que su historial muestra un patrón de delitos similares, tanto antes como después de la desaparición de la niña.En el juicio en curso, se están revisando varios crímenes sexuales cometidos por Brückner en Portugal entre 2000 y 2006, periodo que coincide con la desaparición de Madeleine. Además, en 2020, Brückner fue acusado formalmente en relación con el caso de la niña, aunque no se ha emitido una condena definitiva.
Testimonios previos
El testimonio de Codin no es el primero que vincula a Brückner con la desaparición de Madeleine. En el pasado, otro testigo, un amigo cercano de Brückner, afirmó estar "cien por cien seguro" de que el alemán era responsable del secuestro de la niña. No obstante, la defensa de Brückner ha sostenido repetidamente que las acusaciones son infundadas y que no hay pruebas concluyentes que lo conecten directamente con el caso.A pesar de esto, el testimonio de Codin introduce detalles que coinciden con las circunstancias de la desaparición de Madeleine, lo que ha llevado a los fiscales a investigar más a fondo los movimientos de Brückner en ese periodo.
Otros delitos y confesiones
En el juicio, Codin también mencionó que Brückner se jactaba de otros crímenes sexuales que había cometido. Durante su tiempo en prisión, Brückner habría hablado con Codin sobre su preferencia por niñas y describió cómo en otras ocasiones se había llevado a menores sin matarlas. Estas confesiones han despertado más interés en la conexión de Brückner con otros casos de desapariciones y delitos sexuales en Europa.Un detalle inquietante en la confesión de Brückner a Codin fue su referencia a un autobús en el que, supuestamente, transportaba a las niñas que secuestraba. Aunque no se han encontrado evidencias claras sobre la utilización de este vehículo, la declaración resalta la posibilidad de que Brückner haya estado involucrado en más crímenes de los que se le imputan actualmente.
La reacción de los jueces
Durante el juicio, el tribunal quedó sorprendido por las confesiones detalladas de Codin. Al ser preguntado por la edad de la niña a la que Brückner dijo haber secuestrado, Codin respondió que no quería equivocarse, pero que la niña era "muy joven", lo que coincide con la edad de Madeleine, quien tenía cuatro años al momento de su desaparición.Este testimonio ha intensificado la presión sobre las autoridades para que continúen investigando la relación de Brückner con el caso McCann. La gravedad de las confesiones y los detalles proporcionados en el juicio sugieren que Brückner podría estar más involucrado de lo que se creía inicialmente.
Antecedentes y situación actual
Christian Brückner cumple una condena de siete años por la violación de una mujer estadounidense en Praia da Luz en 2005, dos años antes de la desaparición de Madeleine. Además, está siendo juzgado por otros delitos sexuales cometidos en Portugal durante el mismo periodo.El caso de Madeleine McCann sigue sin resolverse, y cada nueva revelación mantiene viva la esperanza de encontrar respuestas. Este año, en mayo de 2024, Madeleine hubiera cumplido 21 años, y sus padres, Kate y Gerry McCann, continúan la búsqueda de la verdad sobre lo que le ocurrió a su hija.
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