
Netflix ha revelado las primeras imágenes de 'La viuda negra', una película que llevará a la pantalla el crimen de Patraix, uno de los casos más mediáticos de los últimos años en España. La historia se centra en el asesinato de Antonio Navarro Cerdán a manos de su esposa, María Jesús Moreno Cantó, más conocida como Maje, y su amante Salvador Rodrigo Lapiedra. Producida por Bambú Producciones, la película está dirigida por Carlos Sedes y protagonizada por Ivana Baquero, Tristán Ulloa y Carmen Machi.
En las primeras imágenes podemos ver a Ivana Baquero en el papel de Maje, mostrando la dualidad del personaje: una mujer aparentemente dulce y serena, pero que llevaba una vida llena de engaños y secretos. Tristán Ulloa interpreta a Salva, el amante de Maje, un hombre totalmente dependiente de ella y que, bajo su influencia, fue capaz de cometer un asesinato. Carmen Machi, por su parte, se mete en el papel de la inspectora de policía encargada de desentrañar este oscuro caso. La dirección de Carlos Sedes promete mostrar los detalles más turbios de este crimen, enfocándose no solo en el asesinato, sino también en las motivaciones detrás de los implicados.

La historia detrás de 'La viuda negra' se remonta al 16 de agosto de 2017, cuando Antonio Navarro fue asesinado en el garaje de su edificio en el barrio valenciano de Patraix. Recibió siete puñaladas y, desde el principio, la policía descartó el robo como motivo del crimen, enfocándose en su entorno más cercano. Fue entonces cuando comenzaron a sospechar de Maje, quien no solo tenía una actitud sospechosa, sino que además llevaba varias relaciones paralelas, incluida la de Salva, el celador con quien trabajaba en el hospital. Salva, enamorado y manipulado por Maje, creyó que estaba "liberándola" de un supuesto matrimonio tóxico y se encargó de ejecutar el asesinato, siguiendo las instrucciones de su amante.
Después del crimen, la relación entre Maje y Salva continuó. La policía, al notar el comportamiento frío de Maje, decidió intervenir su teléfono, lo que llevó al descubrimiento de conversaciones incriminatorias. Fue así como se destapó todo el plan: Maje había convencido a Salva de que Antonio era un obstáculo para su felicidad, y él, cegado por su dependencia emocional, la ayudó a eliminarlo.
El juicio de este caso se celebró en octubre de 2020 y fue ampliamente seguido por los medios. Tanto Maje como Salva intentaron culparse mutuamente del asesinato, pero las pruebas en su contra fueron contundentes. Al final, ambos fueron condenados: Maje a 22 años de prisión y Salva a 17. Durante el juicio, los peritos aseguraron que ninguno de los dos presentaba problemas psiquiátricos, aunque Salva sí mostraba una enorme dependencia hacia Maje, quien había manipulado la situación a su favor.