CrimeTrueCrime | El Foro del Crimen
Un espacio participativo y especializado en True Crime. Aquí encontrarás información actualizada y noticias sobre casos de crímenes reales y compartir tu opinión y análisis. Te invitamos a registrarte para convertirte en un miembro de la comunidad de CrimeTrueCrime, el Foro del Crimen.

La pesadilla de Isabel Eriksson: El secuestro bajo tierra que inspiró “The Bunker”

  • Iniciador del tema Iniciador del tema LECrim
  • Fecha de inicio Fecha de inicio

LECrim

Well-known member
1736630628731.png


El 16 de enero, la plataforma Viaplay (con disponibilidad en Prime Video) presenta la impactante docuserie “The Bunker”, una producción de crimen real que relata el caso de Isabel Eriksson, la joven sueca que fue drogada, secuestrada y retenida en un búnker subterráneo por el Dr. Martin Trenneborg, un médico que planificó cada detalle de su macabro plan durante años. A continuación, repasamos la historia completa que inspiró esta producción y que conmocionó a Suecia en 2015.

Un encuentro que se convirtió en pesadilla

Lo que empezó como una cita aparentemente inofensiva se transformó en una auténtica pesadilla. En septiembre de 2015, Isabel Eriksson, residente de Estocolmo, conoció a un hombre que se hacía pasar por “un exitoso corredor de bolsa radicado en Londres”. En realidad, se trataba de Martin Trenneborg, médico de 38 años, quien había preparado cuidadosamente cada paso para secuestrarla.

En su segundo encuentro, el 15 de septiembre, Trenneborg llevó a Isabel fresas bañadas en chocolate y champán. Pero esas fresas estaban impregnadas de Rohypnol, un potente sedante frecuentemente asociado con agresiones sexuales. Tras ingerirlas, Isabel cayó inconsciente. En ese momento, el médico aprovechó para violarla y luego trasladarla en una silla de ruedas hasta su coche.

El búnker secreto en Skåne

Trenneborg condujo alrededor de 560 kilómetros hasta su propiedad en Kristianstad, en la región de Skåne, al sur de Suecia. Allí, había construido en secreto, durante cinco años, un búnker subterráneo con muros de hormigón de 32 centímetros de espesor, puertas reforzadas y un meticuloso sistema de cerraduras. El objetivo era crear una “celda” totalmente hermética para mantener cautivas a sus víctimas por tiempo indefinido, sin posibilidad de que sus gritos fueran escuchados.

El búnker contaba con lo básico para subsistir: un dormitorio, baño, cocina improvisada e incluso un espacio para que la víctima tomara aire fresco sin llamar la atención. Sin embargo, la construcción evidenciaba las intenciones aún más inquietantes de Trenneborg, pues había espacio suficiente para albergar a más de una víctima.

Días de terror

Isabel Eriksson estuvo secuestrada durante seis días, en los que vivió un auténtico calvario. Al recuperar la conciencia, descubrió que tenía una cánula en el brazo, suministrada por su captor para mantenerla sedada. Además, Trenneborg le realizó pruebas médicas y la obligó a tomar anticonceptivos. El sometimiento incluía amenazas constantes, agresiones sexuales reiteradas y un conjunto de “reglas” y “sanciones” escritas por el médico para garantizar su obediencia.

Durante el cautiverio, Isabel describió haber visto mascarillas de silicona que Trenneborg planeaba usar para disfrazarse al moverla fuera del búnker. En ocasiones, el médico entraba con un arma y simulaba que deseaba que ella le disparara, generando una atmósfera de terror psicológico.

1736631293118.png

El plan se derrumba

La obsesión y la paranoia de Trenneborg lo llevaron a cometer su gran error. Preocupado por la denuncia de desaparición que la familia de Isabel había presentado en Estocolmo, el médico regresó al apartamento de la víctima para recoger objetos personales, y descubrió que la policía había cambiado las cerraduras. Alarmado, decidió presentarse en la comisaría con Isabel, a quien exigió fingir que estaba con él por su propia voluntad.

Sin embargo, al llegar a la estación de policía, la actitud nerviosa de Trenneborg y el estado de vulnerabilidad de Isabel despertaron las sospechas de los agentes. Separada para ser interrogada, Isabel aprovechó el momento para contar toda la verdad. El médico fue detenido de inmediato.

El juicio y la condena

En 2016, Martin Trenneborg fue condenado por secuestro a diez años de prisión (posteriormente reducidos a ocho en apelación). Aunque admitió haber secuestrado a Isabel y construido el búnker, negó las acusaciones de violación agravada, que no llegaron a prosperar por falta de pruebas concluyentes según el tribunal.

El caso conmocionó a Suecia, recordando a otros macabros sucesos, como el de Josef Fritzl en Austria. Trenneborg perdió su licencia médica y su imagen pública quedó destruida.

El testimonio de Isabel Eriksson

Tras el calvario vivido, Isabel Eriksson ha manifestado en entrevistas que aún sufre las secuelas físicas y emocionales del secuestro, incluyendo trastorno de estrés postraumático y pesadillas recurrentes. Con una valentía admirable, ha contado detalles del cautiverio: cómo intentó escapar usando tornillos como armas, las amenazas constantes de quedar encadenada y la humillación de sentir a su agresor intentando que durmiera a su lado.


Más adelante, se sometió a un innovador proceso terapéutico de exposición, recreando el entorno del búnker para afrontar sus traumas. Gracias a ello, logró avanzar en su recuperación, convirtiéndose en una voz de esperanza para otras víctimas de secuestro y abuso.

“The Bunker”: una docuserie que expone la verdad

“The Bunker” es la docuserie que revela los detalles más oscuros de este crimen y se centra en la historia de supervivencia de Isabel Eriksson. A partir del 16 de enero, Viaplay lanza esta producción en Prime Video, explorando no solo los hechos del secuestro, sino también el proceso de recuperación que ella ha vivido. La docuserie incluye testimonios y material inédito, ofreciendo una visión exhaustiva de cómo la fortaleza de una víctima puede imponerse incluso frente a las circunstancias más estremecedoras.
 
Última edición:
Atrás
Arriba