
Carles Porta vuelve a sumergirse en las sombras del crimen real con La caza del Solitario, una miniserie que reconstruye la figura de Jaime Giménez Arbe, el atracador más buscado de España durante años. Con un estilo narrativo cada vez más depurado y una estructura que escapa del formato clásico, Porta firma un trabajo que va más allá de la crónica policial: explora el contexto, los errores, las obsesiones y las grietas del sistema.
El regreso de una voz imprescindible del true crime

Con La caza del Solitario, el creador de Crims vuelve a demostrar por qué es una de las voces más sólidas del true crime en España. Un relato minucioso, tenso y profundamente humano sobre el criminal que desafió durante años a las fuerzas de seguridad.
Se trata de una serie documental que reconstruye uno de los episodios más oscuros de la crónica criminal española: la historia de Jaime Giménez Arbe, alias ‘El Solitario’, un atracador meticuloso que logró escapar durante años de las fuerzas de seguridad, dejando un rastro de robos y muerte. Con su estilo ya característico, Porta ofrece una mirada profunda a la figura del criminal, pero también a los errores del sistema, las tensiones internas entre cuerpos policiales y el impacto social del caso. Lejos de caer en el sensacionalismo, el relato apuesta por el contexto, los matices y la reflexión.
Se trata de una serie documental que reconstruye uno de los episodios más oscuros de la crónica criminal española: la historia de Jaime Giménez Arbe, alias ‘El Solitario’, un atracador meticuloso que logró escapar durante años de las fuerzas de seguridad, dejando un rastro de robos y muerte. Con su estilo ya característico, Porta ofrece una mirada profunda a la figura del criminal, pero también a los errores del sistema, las tensiones internas entre cuerpos policiales y el impacto social del caso. Lejos de caer en el sensacionalismo, el relato apuesta por el contexto, los matices y la reflexión.
Un punto de inflexión: Crímenes de Castejón

La serie arranca con un hecho que conmocionó al país: en junio de 2004, dos guardias civiles fueron asesinados en un control de carretera en Castejón, Navarra. Aquel crimen desencadenó una operación policial sin precedentes que permitió vincular a ‘El Solitario’ con una larga lista de atracos y delitos cometidos durante más de una década.
Más allá del caso: Porta humaniza sin justificar

A través de entrevistas inéditas, documentos de archivo y reconstrucciones precisas, Porta va más allá del enfoque policial para ofrecer una mirada compleja sobre el criminal. Su objetivo no es glorificar ni condenar, sino comprender qué hay detrás de una figura construida entre el miedo, la prensa y la clandestinidad. La serie plantea preguntas incómodas: ¿Quién era realmente ‘El Solitario’? ¿Un delincuente brillante o un paranoico con delirios ideológicos? ¿Fue su caída una victoria total o aún quedan sombras por aclarar?
Una narrativa más cinematográfica

A diferencia del formato episódico y coral de Crims, La caza del Solitario presenta un desarrollo más compacto y cinematográfico. La narrativa es más contenida, la atmósfera más opresiva y el ritmo, aunque pausado, mantiene una tensión constante. Porta demuestra, una vez más, que sabe hacer del silencio y el detalle una herramienta poderosa.
El mito, la ideología y las fisuras del sistema

‘El Solitario’ no fue un criminal cualquiera. Autodeclarado antisistema, paranoico, meticuloso hasta el extremo, construyó una identidad que descolocó a policías, jueces y periodistas. La serie también explora los errores de las instituciones, la presión mediática y los dilemas éticos de quienes participaron en su captura. La caza del Solitario no busca impresionar con morbo o violencia gratuita. Como en toda la obra de Porta, lo importante es el contexto, la pregunta, la mirada crítica. El crimen se convierte en una puerta para hablar del poder, del miedo, de la justicia y de la condición humana.
A debate

La caza del Solitario no solo reconstruye los hechos: nos invita a pensar. A lo largo de la serie, Carles Porta plantea —sin afirmarlo explícitamente— una pregunta que flota entre líneas y que interpela directamente al espectador: ¿Era ‘El Solitario’ un cerebro criminal o alguien que supo moverse entre las grietas del sistema? La caza del Solitario está disponible en Movistar Plus+, en una miniserie consta de tres episodios de aproximadamente 40 minutos cada uno.