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En los últimos años, la criminología se ha consolidado como una disciplina de gran relevancia para la comprensión y prevención del delito. La creciente intersección de esta ciencia con tecnologías avanzadas y con la neurociencia ha ampliado considerablemente su campo de acción, ofreciendo nuevas herramientas para mejorar la eficacia de la justicia penal y abriendo diversas oportunidades laborales. Esta compendiación analiza el desarrollo actual de la criminología, los avances tecnológicos que apoyan las investigaciones criminales y la influencia de la neurociencia en la justicia penal, abordando la importancia de la educación y la investigación en este campo.
La Criminología como Carrera de Futuro
La criminología es una disciplina interdisciplinaria que combina elementos de derecho, psicología, sociología y otras ciencias afines. Los estudiantes no solo se preparan en el campo académico, sino también en el práctico, gracias a la colaboración con instituciones como las fuerzas de seguridad y entidades del tercer sector. Las salidas laborales son diversas, desde fuerzas de seguridad y prisiones hasta la investigación y la docencia universitaria, esta última cada vez más demandada debido al crecimiento de la disciplina.La criminología es una ciencia joven y con mucho por construir. A diferencia de otras disciplinas más consolidadas, la criminología ofrece un campo en el que aún es posible innovar y contribuir significativamente al desarrollo de una sociedad más justa y segura. Por otro lado, la docencia también es una salida profesional prometedora, aunque demandante, y se requieren especialistas formados específicamente en criminología para dar una perspectiva adecuada y realista en las aulas.
El profesorado en criminología está altamente valorado, con docentes comprometidos y de referencia en sus ámbitos. Además, los programas suelen ofrecer una gran oferta de prácticas, con destinos como fuerzas de seguridad, ONGs, centros penitenciarios y otros organismos relevantes, lo cual facilita la inserción laboral y la orientación profesional de los estudiantes.
Las asignaturas optativas son también un punto fuerte, permitiendo a los estudiantes especializarse en áreas diversas como el Big Data en Criminología, Análisis Económico del Delito, Criminalidad Vial, y otros campos. Esta oferta amplia responde a las demandas del estudiantado, que cada vez busca mayor diversidad en su formación. La Criminología es una ciencia viva, en constante evolución, y los programas reflejan esta dinámica al introducir nuevas asignaturas cada año.
Avances Tecnológicos en la Investigación Criminal
Los avances tecnológicos han revolucionado el campo de las investigaciones criminales. Los cuerpos policiales en diferentes países están utilizando herramientas tecnológicas que parecían de ciencia ficción hace unas décadas. ¿Un claro ejemplo? Los escáneres láser 3D portátiles, capaces de recrear una escena del crimen con una precisión milimétrica. Estos escáneres permiten congelar una escena de manera virtual para que los investigadores puedan analizar detalles como la trayectoria de las balas o la ubicación de las manchas de sangre desde cualquier ángulo, cuantas veces sea necesario, sin la necesidad de desplazarse físicamente al lugar.En muchos países, los servicios de policía científica han implementado estas técnicas desde hace varios años. Se utilizan escáneres de marcas reconocidas para analizar escenas complejas, permitiendo a los inspectores recrear la escena con gran precisión. Estas herramientas también se utilizan para crear simulaciones animadas que ayudan a los tribunales a comprender mejor cómo ocurrió un hecho delictivo.
Otra herramienta revolucionaria es el uso de drones capaces de producir imágenes tridimensionales aéreas, lo que permite la inspección de escenas de difícil acceso. Los drones equipados con cámaras térmicas facilitan la documentación de escenas del crimen, incluso en condiciones de poca luz, aumentando significativamente las posibilidades de recopilación de pruebas sin interrupciones por condiciones ambientales.
La impresión 3D también está cobrando relevancia. En algunos casos, la policía ha utilizado esta tecnología para crear retratos robóticos en 3D de sospechosos y reproducir escenas de crímenes complejas con el objetivo de revivir la memoria de los investigadores o atraer público que pueda aportar pistas. Estas técnicas permiten reexaminar casos antiguos y sin resolver, aportando una nueva perspectiva que podría ser decisiva para su resolución.
Predicción Criminal: Ciencia Ficción o Realidad?
Los desarrollos tecnológicos han permitido también avances en la predicción de delitos. El software predictivo, creado en colaboración entre investigadores y cuerpos policiales, ha mostrado resultados prometedores al permitir a la policía incrementar las patrullas en zonas donde, según los patrones delictivos previos, es más probable que ocurra un crimen. Las predicciones se basan en datos estadísticos de delitos pasados para identificar patrones y tendencias. En algunas ciudades donde se implementó este tipo de tecnología, se registró una caída significativa en los delitos.El software predictivo proporciona datos cartográficos en tiempo real con puntos calientes que controlar. Este software permite a la policía anticiparse a posibles crímenes reincidentes, aunque no se aplica a homicidios, sino a delitos como robos de vehículos, hurtos y asaltos.
Sin embargo, existen críticas y dilemas éticos acerca del uso de estos programas predictivos. Aunque prometen prevenir el delito, también se corre el riesgo de caer en perfiles sesgados que afecten desproporcionadamente a determinadas comunidades. Además, surge la preocupación de si la tecnología puede realmente reemplazar el juicio humano en la toma de decisiones cruciales.
La Influencia de la Neurociencia en la Criminología
Otro campo de gran relevancia para la criminología moderna es la neurociencia. Esta ciencia ha permitido comprender mejor los mecanismos que influyen en la conducta delictiva, lo cual podría tener grandes implicaciones para la justicia penal. Sin embargo, también existe el riesgo de caer en una "medicalización" del comportamiento humano. Algunos neurocientíficos afirman que la capacidad de comprender y querer de un individuo se reduce a reacciones químicas en el cerebro, lo que podría llevar a una redefinición del concepto de responsabilidad penal.En algunos países, ciertos autores proponen una perspectiva determinista radical, según la cual el análisis procedimental de la capacidad de comprender y de querer debe ser completamente medicalizado. En esta visión, el comportamiento delictivo se percibe como un epifenómeno patológico del cerebro, lo que implica que el castigo legal debería ser reemplazado por un tratamiento psiquiátrico. Sin embargo, esta perspectiva despierta críticas por parte de aquellos que defienden la importancia de la capacidad de elección y el libre albedrío.
En otros contextos, se observa una postura más moderada que rechaza la supremacía de la neurociencia sobre el derecho penal tradicional. Aunque el comportamiento está condicionado biológicamente, una voluntad condicionada sigue siendo libre, lo cual es esencial para la aplicación de la justicia. Según esta visión, la neurociencia debe ser vista como una herramienta complementaria, pero no como un reemplazo de los parámetros tradicionales de evaluación jurídica.
La necesidad de un enfoque equilibrado es fundamental para evitar caer en los excesos de una visión puramente determinista. La responsabilidad penal debe basarse en la capacidad mínima de racionalidad y elección del individuo. En este sentido, aunque las patologías pueden limitar la capacidad de comprensión y de voluntad, no todas las conductas delictivas deben ser psiquiatrizadas o medicalizadas.
Criminología: La Ciencia que Todo Aún Está por Construir
La criminología es una carrera con un futuro prometedor, en la que aún quedan muchos temas por investigar y desarrollar. La enseñanza de esta disciplina está en constante evolución para responder a las demandas de la sociedad y los estudiantes. Con una alta demanda de profesionales en el ámbito, los estudiantes que eligen esta carrera son en su mayoría apasionados y comprometidos con la idea de transformar el mundo.El enfoque multidisciplinario de la criminología permite a los estudiantes formarse en campos diversos como el derecho penal, la psicología, la investigación forense y la sociología. Esto se refleja en la gran variedad de Trabajos de Fin de Grado (TFG) presentados, con temas que van desde la eutanasia y los derechos de las mujeres en tiempos de guerra hasta proyectos para prevenir la reincidencia de menores. La Criminología es una ciencia viva que cambia y evoluciona, y el estudiantado está dispuesto a cuestionar las normas establecidas y buscar mejores soluciones para los problemas de la sociedad contemporánea.
El estudio de la criminología ofrece, además, una experiencia única gracias a las prácticas en colaboración con entidades de gran prestigio. Entre las prácticas más solicitadas se encuentran las que se realizan con las fuerzas de seguridad, ONGs y organizaciones que trabajan con víctimas de violencia de género. Estas experiencias permiten a los estudiantes conocer de primera mano los desafíos de la profesión y decidir en qué ámbito les gustaría trabajar.
Desafíos y Oportunidades Futuras
El rápido avance de la tecnología y la globalización presentan grandes desafíos para la criminología. Delitos como la ciberdelincuencia y el terrorismo transnacional son cada vez más complejos de prevenir y combatir, lo que requiere de una adaptación continua y el desarrollo de nuevas metodologías. Los criminólogos deben estar preparados para enfrentarse a un panorama criminal en constante cambio y altamente sofisticado, donde la tecnología juega un papel crucial. En este contexto, la colaboración entre la tecnología, la neurociencia y la criminología será fundamental.Sin embargo, a pesar de los avances y las oportunidades que ofrecen estas nuevas herramientas, es esencial abordar de manera crítica los desafíos éticos y legales que conlleva su uso. Es importante no perder de vista que la justicia penal debe centrarse en la persona humana, en su capacidad de elección y en su potencial para la rehabilitación. La ciencia y la tecnología deben ser vistas como instrumentos para apoyar y mejorar la eficacia del sistema de justicia, no como sustitutos de los valores fundamentales que lo rigen.
En conclusión, la criminología es una ciencia joven y en constante desarrollo, cuyo futuro se perfila como un desafío estimulante. La interdisciplinariedad, la investigación y el uso de tecnologías avanzadas ofrecen a los criminólogos la oportunidad de contribuir significativamente al avance de la justicia penal. Al mismo tiempo, la incorporación de la neurociencia nos invita a cuestionarnos hasta qué punto podemos confiar en la objetividad de los avances científicos para evaluar la responsabilidad humana.
Es crucial que la criminología se mantenga crítica, inclusiva y abierta al cambio, para adaptarse a los nuevos retos de la sociedad contemporánea. Para los estudiantes, profesionales y docentes, el camino a seguir es uno de innovación constante, colaboración interdisciplinaria y un compromiso firme con la búsqueda de la justicia y la equidad social. La tecnología y la neurociencia deben servir como aliados en esta búsqueda, pero nunca deben sustituir el juicio humano y el respeto por la libertad individual que son la base de toda sociedad justa.
Fuentes:
La criminología: su utilidad y perspectivas futuras
Neurociencia, Derecho y Criminología
Investigaciones criminales: la tecnología al servicio de los expertos franceses
Criminología, una carrera de futuro donde todo está “por construir y por hacer”
